miércoles, 18 de julio de 2012

No vote por ellos ... Congreso

En Chile existe un total de 22 senadores (el 57,8 % del total) que llevan màs de 14 años ininterrumpidos en el Congreso, sea en la Càmara de Diputados como en el Senado (sin considerar a quienes en este tiempo han sido presidentes, ministros o fueron alcaldes designados antes del retorno a la Democracia). Pensando en la necesidad de recambio generacional, y en que millones alegan por la presencia de "los mismos de siempre" en el Congreso Nacional, los invito a no votar nunca màs por ninguna de las siguientes personas:

Senadores:

Jaime Orpis (UDI): 22 años. Diputado entre 1990 y 2002. Senador a partir de 2002, su perìodo termina en marzo de 2018.


Carlos Cantero (RN): 22 años. Diputado entre 1990 y 1998. Senador a partir de 1998, su perìodo termina en marzo de 2014.


Isabel Allende (PS): 18 años. Diputada entre 1994 y 2010. Senadora a partir de 2010, su perìodo termina en marzo de 2018.


Baldo Prokurica (RN): 22 años. Diputado entre 1990 y 2002. Senadora a partir de 2002, su perìodo termina en marzo de 2018.


Jorge Pizarro (DC): 22 años. Diputado entre 1990 y 1998. Senador a partir de 1998, su periodo termina en 2014.


Ignacio Walker (DC): 18 años. Diputado entre 1994 y 2002. Senador a partir de 2002, su periodo termina en 2018.


Guido Girardi (PPD): 22 años. Diputado entre 1990 y 2006. Senador a partir de 2006, su perìodo termina en 2014.


Jovino Novoa (UDI): 14 años. Su perìodo termina en marzo de 2014.


Alejandro Garcìa (UDI): 18 años. Diputado entre 1994 y 2011. Senador a partir de 2011, su periodo termina en 2014.


Juan Pablo Letelier (PS): 22 años. Diputado entre 1990 y 2006. Senador a partir de 2006, su perìodo termina en marzo de 2014.


Juan Antonio Coloma (UDI): 22 años. Diputado entre 1990 y 2002. Senador a partir de 2002, su periodo termina en 2018.


Hernàn Larraìn (UDI): 18 años. Su perìodo termina en marzo de 2018.


Alejandro Navarro (MAS): 18 años. Diputado entre 1994 y 2006. Senador a partir de 2006, su periodo termina en 2014.


Hosain Sabag (DC): 22 años. Diputado entre 1990 y 1998. Senador a partir de 1998, su periodo termina en 2014.


Vìctor Pèerez (UDI): 22 años. Diputado entre 1990 y 2006. Senador a partir de 2006, su perìodo termina en 2014.


Mariano Ruiz Ezquide (DC): 22 años. Su perìodo termina en marzo de 2014.


Alberto Espina (RN): 22 años. Diputado entre 1990 y 2002. Senador a partir de 2002, su perìodo termina en 2018.


Josè Garcìa Ruminot (RN): 22 años. Diputado entre 1990 y 2002. Senador a partir de 2002, su perìodo termina en 2018.


Eugenio Tuma (PPD): 18 años. Diputado entre 1990 y 2006. Senador a partir de 2006, su perìodo termina en 2014.


Antonio Horvath (RN): 22 años. Diputado entre 1990 y 1994. Senador a partir de 1994, su perìodo termina en 2018.


Patricio Walker (DC): 14 años. Diputado entre 1998 y 2010. Senador a partir de 2010, su perìodo termina en 2018.


Pedro Muñoz Aburto (PS): 18 años. Diputado entre 1994 y 2006. Senador a partir de 2006, su perìodo termina en 2014.


De paso podrìamos reducir el periodo de cada senador a solo 4 años, al igual que el Presidente y los Diputados, y que puedan ser re-electos tan sòlo 1 vez. Es una idea ...

viernes, 11 de mayo de 2012

La falacia de los huevos azules


por Antonio Loma-Osorio Pacheco

Me di un baño de fútbol copero esta semana. Derrota inapelable pero digna de Unión el miércoles en Santa Laura y carnaval azul el jueves en el Estadio Nacional. Ambas ocasiones, coronadas con un colorido y espectacular marco de público.
Perdió la Unión, sin espacios a la duda, ante un muy superior Boca Juniors. A la salida del estadio, escuchaba el consuelo de los hinchas hispanos, quienes no se cansaban de repetir que “al menos, los cabros pusieron huevos”.
Tras un buen rato intentando descifrar por dónde podía entrar al Estadio Nacional, logré que alguien, en medio del caos dantesco, me diera pistas de cómo llegar a mi asiento… Atravieso la puerta de Avenida Grecia y camino hacia el coliseo, mientras por mi lado no cesa el desfile de hinchas azules quienes pregonan, en una sola voz: “Hoy lo damos vuelta. Hay que poner huevos”…
“Poner Huevos”… Hm…
Logro encontrar una butaca y veo con gusto cómo el estadio se va tiñendo de azul. Por las escalinatas sube un muchacho con una bandera de la U que le cubre las espaldas y, apenas se encuentra con otro camarada, le pregunta ansioso:
“¿Cómo estamos para hoy?”
Su socio lo mira, imposta curiosamente la voz, como imitando un acento argentino, y le responde…
“Bien locooooo (ese loco debe leerse realizando el fonema O, pero con reproducción bucolabial emulando la letra E… Es algo así como locoeoeoeoeoe). Hoy ganamos por aguante y huevooooo (para leer ese huevo, repítase el procedimiento explicado más arriba y aún con la impostación de voz imitando un acento argentino)”. Alocución acompañada, obviamente, por el símbolo de los cachos que Ronnie James Dio popularizara en los conciertos de Heavy Metal.
Que en Chile seamos buenos para importar asuntos del exterior no es cosa nueva (ni mala tampoco, ojo). Sin ir más lejos, el “Padre de la Patria” era un fulano de apellido O´Higgins y el decano de nuestro fútbol es nada más y nada menos que el querido Santiago Wanderers.
Mucho menos yo puedo criticar la importación futbolística que nos ha llegado desde el otro lado de la Cordillera, pues desde el “Charro” Moreno en adelante, el aporte venido desde Argentina, sin dudas, ha dejado su marca. Nómbrelo usted: Spedaletti, Isella, Gorosito, Scandoli, Pinina Palacios, Leo Rodríguez, Barti, Hueso Houseman…  cualquiera que se le venga a la memoria. Elíjalo. No son pocos quienes no han hecho sino dejar un buen recuerdo por estos pastos.
Pero hubo algo que, de pronto y sin anestesia, cambió radicalmente nuestra forma de ver el fútbol. En mi tierna y cada vez más lejana niñez, pasaba buenas horas del día jugando a la pelota. Soñaba con ser Horacio Simaldone (antes que rompiera mi corazón y se fuera al Colo), al tiempo que mis amigos albos querían emular a Vasconcellos y quienes vestían de azul imitaban a Orlando Mondaca o a Liminha. A ninguno se nos hubiera pasado por la cabeza encarnar a Atilio Guzmán, Chupete Hormazábal o a Héctor Díaz.
Pero hoy la cosa es bien distinta. Oigo a los hinchas y lo único que importa es poner “Huevos”. Sin dudas que se trata de una terminología importada; y todos sabemos de dónde. De partida, en Chile a los genitales masculinos siempre se les han llamado bolas, huevas o cocos y el asunto de “poner huevos” es una clara referencia a la virilidad u hombría del atleta a la hora de defender sus colores, simbolizándolo todo en los testículos.
El asunto se popularizó con la llegada a Chile de los famosos barrabravas, la importación futbolística argentina que pocos quieren ver en los estadios. De un minuto a otro, el talento, la creatividad y, en definitiva, el FUTBOL quedaron en un rol secundario, para dar paso al interminable desfile de huevos, aguante, corazón y demás.
Veo el partido de la Chile con júbilo. Mucho tiempo que no veía en vivo a un equipo chileno demostrar tan avasalladora categoría. Junior Fernandes toma el balón. Lujito para allá, lujito para acá y un defensor de Deportivo Quito queda sentado en el suelo implorando piedad, ante tamaña demostración de destreza. Desde la tribuna baja un tibio aplauso que premia el talento del delantero.
Pasan unos minutos. Pelotazo largo de los ecuatorianos hacia el área de la U. José Rojas, uno de los futbolistas más limitados que yo recuerde en el primer nivel, se tira al piso y, en una jugada de rutina, envía el balón a un costado. El estruendo es inmediato… “¡Grande Pepe!”, “¡Grande Capitaaaaaaaaaaaaaaan!” Podría asegurar que algunos celebraron más esa acción nimia que los goles del cuadro vencedor.
Sigo sin entender el asunto de los huevos para acá y huevos para allá. Ok, me veo en la obligación de saltar la Cordillera. Boca Juniors es quizás el epítome de la cuestión. Es el equipo que con mayor fidelidad representa eso de los huevos. Y mucho de eso radica en una propia convicción interna de los fanáticos de ese club en asegurar que todos sus triunfos se han basado casi exclusivamente en el aspecto de la furia guerrera.
Falso, falso y cada vez más falso. Tras un período de gloria del cuadro xeneise en los 70, de la mano del mítico Toto Lorenzo, las huestes oro y cielo vieron con desazón como el equipo no cosechaba absolutamente nada en los 80. Y nada de nada. Incluso, tuvieron que sufrir en carne propia una ignominiosa derrota por 9-1 frente al Barcelona en la Ciudad Condal y una crisis deportiva que casi los manda a la Primera B. Ah, pero en ese equipo todos “la mojaban”.
No fue sino hasta la irrupción de futbolistas cualitativamente competentes, en el ocaso de los 90 y todo el nuevo milenio que Boca Juniors retomó su senda victoriosa. Con nombres como Riquelme, Oscar Córdoba, Chicho Serna, Palacio, Tevez, Marcelo Delgado, Guillermo Barros Schelotto o Martín Palermo el cuadro de La Boca logró llenar su vidriera de trofeos internacionales.
Volvemos a lo nuestro. Más allá de que la Chile dio la hora y hasta se fue a los potreros cuando había puros gladiadores que no hacían más que poner huevos y jugar con el corazón, si mal no recuerdo, el Colo Colo campeón de la Copa Libertadores basó su éxito en una filosofía de juego muy definida, vanguardista para esos años, y que se sustentaba en un balance futbolístico óptimo entre aguerridos (Margas, Peralta, Vilches) y talentosos (Yáñez, Garrido, Espinoza). Podríamos decir, entonces, que el mayor triunfo deportivo en la historia de Chile tuvo como sostén el fútbol y no el sustento y protección del embrión en los animales ovíparos.
Boca le ganó a Unión sin apelaciones y ¡Oh, paradojas! La gran figura fue Juan Román Riquelme, quien al trotecito, al salto y sin poner ni siquiera un ápice de la yema de un huevo de codorniz desplegó talento a raudales y dejo Knock Out a los hispanos. También estuvieron, entre otros,  Mouche, quien definió sin titubeos cuando pudo hacerlo, y un arquero como Orión quien debe estar entre los mejores que se han visto por pastos chilenos en el último tiempo.
La U le dio una paliza a Deportivo Quito. Y lo hizo gracias a un fútbol asombroso, trabajado, con pilares como Mena, Rodríguez, Junior y su talento inagotable, Díaz, Henríquez y Aránguiz, por nombrar a algunos.
¿Y los huevos? Esto es fútbol. Los famosos huevos dejémoslos para una riquísima paila con jamón y un café con leche a la hora de onces. Ideal para estos días de invierno.


https://www.facebook.com/profile.php?id=654759199 

viernes, 24 de febrero de 2012

Coyhaique: rompiendo el cerco comunicacional

por Magdalena Rosas

Queridos y queridas compañeros, amigos y familia:


Son las 23:27 del jueves:

Otra noche mas de noticias, barricadas, velaton en la puerta de la Intendencia para repudiar la violencia en Puerto Aysen y una gran marcha pacifica con mas de seis mil personas y que termino en la plaza de Coyhaique con un acto cultural donde hubo familias y niños, completamente en paz.
La velaton y caceroleo que hacemos todos los dias a las diez de la noche frente a la Intendencia, se llevò adelante en absoluta calma.
Esta mañana a las 11 un grupo de mujeres, en una accion absolutamente pacifica y en repudio a la fuerza que esta usando carabineros, se tomo la Intendencia. Un sindicato de mujeres se tomo la Gobernacion Provincial.La toma durò dos horas.

Vimos por nuestra ciudad la huelga de los Empleados publicos, empleados muncipales,muy pocos autos en las calles, y gente que durmio esperando combustible que no llego y no llegarà porque a la Capital Regional no entran ni salen camiones.

Nos preocupan muchas cosas:

1.- la idea de algunas personas de que la violencia se le fue de las manos a la organizacion. Estigmatizar y criminalizar el movimiento es muy grave y responde a una estrategia que busca insegurizar a la cudadania y crear panico infundado de saqueos y violencia, justificando asi la violencia de las fuerzas especiales.
Abundan las declaraciones y acciones no violentas que no son difundidas por la prensa. Este movimiento social es profundamente pacifico y asi lo ha demostrado en las marchas, encuentros y acciones que se han llevado adelante estos dias.

2.- Los niveles de represion tienen que ser comprendidos en el contexto regional. NUNCA hasta el dia 9 de mayo recien pasado se habia tirado una bomba lacrimogena en Coyhaique. Habia protestas y tomas del Puente Ibañez de parte de los pescadores que han tenido una demanda historica con una ley de pesca que los ha perjudicado siempre, pero NUNCA habiamos tenido estos niveles de represion y uso de la fuerza como hemos visto en estos dìas. Los pescadores en Aysen llevan diez dìas resistiendo. Sus planteamientos fueron claros desde un principio, pero el Gobierno NO ha querido escuchar.

3.- Que el Gobierno diga que la Intendenta Regional es la que tiene que encabezar las conversaciones es aumentar la presion en la movilizacion. La Region entera grita constantemente que la Intendenta se vaya. Si quieren solucion, la UNICA forma de lograrlo es QUE VENGAN A LA REGION LOS MINISTROS.¿TAN DIFICIL DE ENTENDER?

4.- Los llamados a la radio en Coyhaique repiten desde hace dos horas lo mismo: Los vecinos se juntan a hacer una fogata, hacer una manifestacion pacifica, hacer una barricada y llegan fuerzas especiales tirando bombas lacrimogenas directamente a las casas donde hay mujeres y niños.

5.- Es tranquilizador saber que el Obispo se encuentra en Aysen.

Estamos bien de abastecimiento. Todos empeñados en ayudarnos,muy pocos autos con combustible, ya no queda gas en coyhaique, estamos en campaña de juntar alimentos para nuestros compañeros de Aysen.
Los camiones siguen bloqueando los caminos de entrada y salida de coyhaique, hoy llego a la region el Presidente de la Asociacion nacional de camioneros.
El animo sigue en alto a pesar de todos los problemas, todos concentrados en las movilizaciones.
El proximo sàbado desde las cuatro tenemos MARCHA REGIONAL,la que terminaremos tambien con un acto cultural dirigido a los vecinos y las familias de nuestra capital regional.

LOS PATAGONES SOMOS GENTE PACIFICA, NO SOMOS VIOLENTOS, NO QUEREMOS MAS VIOLENCIA, MAS BALINES, MAS REPRESION.
POLICIAS DE FUERZAS ESPECIALES LLEGADAS EN LOS AVIONES HERCULES...VUELVANSE DE DONDE VINIERON, AQUI EN LA REGION DE AYSEN NO LOS QUEREMOS.

CUANDO ESCUCHARA EL GOBIERNO?
MINISTRO DE ENERGIA Y DE HACIENDA
USTEDES PUEDEN CAMBIAR LA SITUACION EN AYSEN
¿QUE ESTAN ESPERANDO?

Saludos y cariños esperanzados
Todos somos Aysen, TU PROBLEMA ES MI PROBLEMA.

Magdalena Rosas.
ROMPIENDO EL CERCO INFORMATIVO DIFUNDE Y COMPARTE

martes, 3 de enero de 2012

Carta abierta al pueblo colo-colino


En la oscuridad de este desagradable momento històrico, creo necesario reflotar este blog moribundo, para poner algunas cosas en claro. La rabia que hoy siente cada colo-colino al ver como nuestro club es arrastrado al pantano de la mediocridad, se transforma en impotencia cuando vemos celebrar al plumìfero con soberbia. Sentimientos comprensibles, pero que nos enturbian la visiòn, entorpeciendo la perspectiva necesaria.

Una cosa que la mayor parte de los colo-colinos parece haber olvidado, es que nosotros no somos grandes por haber ganado màs tìtulos que los demàs, por haber conquistado la Copa Libertadores o por tener un Estadio. Los tìtulos son solo la consecuencia de nuestra grandeza, que es bien distinto.

Nuestra grandeza radica en los principios que el club fundado por Arellano defendìa y los valores que el uniforme elegido por Quiñones representaba: pureza y seriedad. Con sobriedad, Colo-Colo naciò con la vocaciòn de servir y representar al pueblo de Chile, de Arica a Magallanes. No a un grupo de poder, a una pròspera comunidad inmigrante, a una empresa, a la elite de un plantel universitario o a una ciudad especìfica, sino al paìs en su conjunto. De ahì viene el Lema: Quièn es Chile?, Colo-Colo; Quièn es Colo-Colo?, Chile.

Es justamente la simbiosis entre Colo-Colo y el pueblo de Chile la fortaleza del Club, y la razòn por la cual se ve constantemente amenazado. Ello explica ademàs, porque el poder siempre ha querido cooptarlo. Porque presidentes y dictadores buscaban ser ungidos como "Presidente honorario" de Colo-Colo, en tanto sìmbolo del pueblo; y porque constituyò el botìn màs preciado para las sanguijuelas de Blanco y Negro S.A.

Colo-Colo simboliza la rebeldìa latente de un pueblo sometido por las armas y el poder econòmico, su nombre de hecho no es casual y es el ùnico club de Primera Divisiòn en Amèrica del Sur que ostenta con orgullo un nombre indìgena. Gracias a Colo-Colo, el fùtbol era la ùnica esfera en la cual el pueblo era capaz de derrotar a los poderosos, de vencer la adversidad y torcerle la mano al destino. La ùnica revancha que tenìa el pueblo de una vida entera de abusos e injusticias. Eso es Colo-Colo, como bien decìa el documental Raza Brava: el orgullo de sentirse pueblo; en un paìs arribista y asquerosamente clasista. Era de cierto modo, una reserva moral del paìs.

Sin embargo, nos dejamos llevar por el èxito fàcil, los triunfos, los tìtulos, las copas, las adulaciones de los medios y los coqueteos del poder. Olvidando nuestra naturaleza, nuestra esencia intrìnsecamente popular. Primero le entregamos nuestro club a empresarios poco escrupulosos, que lo dejaron en la ruina. Luego se lo dimos en bandeja a quienes constituyen todo lo contrario de lo que Colo-Colo representa. A algunas de las familias màs ricas del paìs: los Tagle, Erràzuriz, Vicuña, Piñera, Vial, Levy o Krauss.

Y luego nos preguntamos, por què los jugadores no mojan la camiseta?, por què parece que cualquiera puede jugar en Colo-Colo?, por què hay que pagar entre 5.000 y 25.000 para ver al equipo de pueblo?, por què nuestros rivales se rièn en nuestra cara?, por què hay hinchas que le dan la espalda a nuestros ìdolos para congraciarse con los nuevos patrones?, por que el equipo del pueblo debe tener patrones que pertenecen al 1% màs rico del paìs?

Màs que ver a un plumìfero o a una monja celebrando de vez en cuando, duele ver a Colo-Colo secuestrado por un grupo de especuladores financieros que se han hecho aun màs millonarios, a costa de nuestra ilusiòn. Ante la actitud indiferente e indolente de la mayorìa de los hinchas, mientras van desnaturalizando el club fundado por Arellano, transformando nuestros sìmbolos en mera mercancia, arrastrando al club a la mediocridad de ser solo un equipo màs.

Por esto, es hora de decir basta. Colo-colinos es hora de recuperar nuestro club. Colo-Colo es para los colo-colinos. Fuera Blanco y Negro !

Solo espero, que cuando volvamos a salir campeones no olvidemos quien es el verdadero enemigo.

JcScG